Record de incendios en Canadá ¿Alerta del Cambio Climático?

Canadá se encuentra hace meses en una carrera contrarreloj frente a la propagación de los incendios forestales.  Con 547 focos de incendio activos al 1 de julio, según datos obtenidos del Centro Interagencial Canadiense de Incendios Forestales (CIFFC, por sus siglas en inglés), el país atraviesa la peor temporada de incendios de su historia pudiendo alcanzar, incluso, un récord global.

La temporada de incendios forestales en el país norteamericano se da entre los meses de abril y octubre. Sin embargo, en lo que va del año, los expertos estiman que habrá ardido más de diez veces el área promedio. Actualmente, de los 547 focos activos, 275 se encuentran fuera de control, 102 están siendo gradualmente apaciguados y 170 se hallan monitoreados (CIFFC). Las provincias mayormente afectadas son la Columbia Británica, Alberta y Quebec, aunque existen focos en prácticamente todas las regiones del país.  

El hecho resulta llamativo ya que, a pesar de ser un territorio tendiente a este tipo de fenómenos, los mismos suelen darse en los ecosistemas secos y calurosos. Sin embargo, durante la temporada actual se encuentran bajo las llamas las áreas más diversas. Políticos, investigadores y científicos, incluso gran parte de la opinión pública, vinculan la alta propagación a las consecuencias del cambio climático.

En 2021, un reporte del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) advirtió sobre el empeoramiento de las condiciones climáticas de los incendios con el aumento del calentamiento global. En esta línea, Canadá es uno de los países más afectados del mundo, en tanto el comportamiento humano está contribuyendo a calentar al país a “un ritmo dos veces mayor que el promedio mundial” en palabras de Nathan Gillett, científico investigador del Departamento de Medioambiente del Gobierno. 

Estos postulados se evidencian en el factor común existente entre los territorios incendiados: las altas temperaturas y un período prolongado de sequías en varios ecosistemas. Michael Norton, del Departamento de Recursos Naturales de Canadá, se pronunció respecto a esto “El cambio climático está aumentando la frecuencia y la intensidad de los incendios forestales y creando temporadas de incendios más largas en Canadá” (BBC, 2023). De manera directa, la problemática puede generar un aumento de las tormentas eléctricas, producto de las altas temperaturas, incrementando a su vez la caída de rayos, principal generador de los incendios forestales que se desarrollan hoy día. La principal preocupación se desprende del mantenimiento de estas condiciones como una nueva normalidad de cara al futuro. 

A su vez, existen diversas cuestiones que pueden influir en el aumento exponencial de incendios, en tanto su iniciación depende de un conjunto de factores. Entre estas se destacan la disminución de las políticas gubernamentales de quemas planificadas de prevención, la plantación de especies menos tolerantes y más comerciales y el creciente desarrollo humano en áreas boscosas. Incluso, existen teorías que hablan de ecoterrorismo, es decir, grupos e individuos que buscan llamar la atención pública y posicionar la agenda climática en los espacios de poder y decisión. 

El país ha recibido ayuda en forma de recursos materiales y capital humano de la comunidad internacional, principalmente de Estados Unidos, con quien firmó un acuerdo de cooperación mutua en la lucha contra los incendios forestales. Sin embargo, Canadá aún mantiene un doble frente de lucha.

Por un lado, las consecuencias inmediatas de los incendios. Muchas ciudades han tenido que ser evacuadas por el alcance del fuego lo cual implica un reacomodamiento de miles de personas y pérdida de infraestructura en el lugar. La disminución de la calidad del aire por la densidad del humo es también un factor bajo consideración en tanto pone en riesgo la salud de los ciudadanos, no solo de Canadá, sino también de Estados Unidos y Europa que han visto la llegada de la humareda. 

Por el otro, las expectativas negativas respecto al cambio climático y la necesidad de políticas ambientales urgentes que ayuden a disminuir sus efectos.